Me he despertado a las 9 am. Sé que
es tarde, más tarde de lo normal, pero últimamente me levanto tarde y mi mama
no me despierta, ella no tiene idea de cuánto le agradezco este gesto, no, me
siento obligada a vivir y me levanto cuando quiero cuando tengo una motivación,
lo que me da cierto control y me ayuda.
Desperté sin prisas, aunque
desperté sin ansiedad terminé devorando 3 panes con palta, si estoy engordando consciente
y tristemente pero por ahora no puedo evitarlo.
Luego de decirle a mamá que hoy
no es un día bueno para mí, subí al cuarto supuestamente a seguir durmiendo o
tirarme en la cama, pero lo que hice fue ordenar el cuarto la cama y luego
prender la laptop y heme aquí escribiendo, postulando a un concurso de arte,
inventando proyectos, escuchando música depresiva que me hace bien.
Sobreviviendo, ya tomé las 4
pastillas que tomo en la mañana, tres antidepresivos y un medicamento para el
dolor neuropático de mi fibromialgia pero que también funciona como ansiolítico.
Los antidepresivos son genéricos y no tiene protección, por lo tanto sufro al
tomarlos porque son muy amargos, pero ya casi me acostumbré, no sé exactamente
como trabajan, no tengo idea, pero de momento estoy estable pero sin mejorías,
lo que me preocupa más de todo es engordar, para mí es un suplicio, pero no
estoy pudiendo controlar nada de eso, es terrible.
Hubo una época en que con 1 solo
antidepresivo, yo estaba en las nubes de felicidad, y no tenía hambre, ahora
tomo tres y me siento igual.
Es un día sombrío que me gusta,
no sé cómo lidiar con la tristeza y la melancolía porque son formas de vivir
con las que he vivido siempre y no me desagradan del todo.
Esta terrible adicción al dolor,
al sufrimiento, no sé cómo abandonarla, como dejar algo que me duele y me hace
sentir bien, debo cambiar toda mi forma de percibir el mundo, sé que si cambio
esto muchas cosas cambiarán seguro para bien, pero aun lo bueno me da miedo,
porque lo bueno sigue siendo nuevo y lo nuevo siempre me asusta.